Y el mensaje llegó a eso de las 11:03 pm, decía así:
[...] me siento realmente mal, pero más mal me hace sentir que te alejes de mí un poco. Bueno, no debí decir eso, ya dormiré. Hasta mañana.
Y respondió:
Cuídate mucho, recupérate. Y no te preocupes en otras cosas, sólo en lo que es importante, tu salud. Buenas noches, espero mañana sea un mejor día para ti.
Debió haber respondido:
Me duele hacerlo, pero antes me has dicho que tienes a alguien más, y eso me duele a fatalidad. Y este sentimiento dentro de mi mata. Te quiero, pero si sigo así, después no tendré ni alma, ni vida, ni consuelo.
Y no vuelvas a repetir un te quiero, que al final terminaré creyéndolo.